La necesidad de nuevas y mejores infraestucturas


Vista parcial del puerto de Tarragona, con su explanada para
la carga-descarga de vehículos,
y del complejo petroquímico que
se beneficia de la proximidad de
las instalaciones portuarias y
de las conexiones con la red
ferroviaria y de autopistas.

El crecimiento poblacional y el desarrollo económico de Cataluña durante la primera década del siglo xxi han puesto de manifiesto que las infraestructuras existentes no cubren las necesidades de movilidad de personas y mercancías. Según algunas entidades económicas y sociales, este déficit de conectividad genera limitaciones en el desarrollo del comercio, la deslocalización de empresas, la pérdida de competitividad con respecto a otras regiones e, incluso, una disminución del peso económico de Cataluña en el conjunto de España. Por el contrario, otros colectivos consideran que el territorio ya dispone de las infraestructuras básicas suficientes, pero deben ser gestionadas adecuadamente, por ejemplo, facilitando la construcción de pequeñas infraestructuras de proximidad para un mejor aprovechamiento de las grandes.